Yoga para la tercera edad

Existen muchos problemas de salud y enfermedades relacionadas con la tercera edad. No podemos evitar el envejecimiento ni el deterioro físico que inevitablemente se presenta con el paso del tiempo, pero muchas veces puede prevenirse con el yoga para la tercera edad.
Lo que el yoga enseña a los adultos mayores es que el envejecimiento es un proceso existencial y personal que hay que considerar como una etapa interesante de la vida. Esta convicción dependerá de la actitud de cada uno y el yoga puede ayudar mucho para que esto sea así.
Lo que se logra con el yoga para la tercera edad es fomentar una actitud de enriquecimiento y crear las condiciones para que el envejecimiento sea natural y con un estado de ánimo positivo, fresco y jovial. Incluso, cuando la edad del practicante es muy avanzada.
El yoga, con sus distintas técnicas, brinda una invaluable ayuda para las personas mayores. Las clases de yoga para la tercera edad son distintas a cualquier otra sesión de yoga. Se tiene en cuenta el aspecto físico, psicológico y neuronal de la persona.
Los efectos del yoga también pueden ser útiles como terapia complementaria y son de gran ayuda para los conflictos psicológicos de la tercera edad: angustia, soledad, inseguridad y otros. Prácticamente no hay límite de edad para practicar yoga y las personas que lo practican no sienten el paso de los años.
Entre algunos de los beneficios del yoga para la tercera edad tenemos que:
Aumenta la flexibilidad del cuerpoMejora el tono muscularAumenta la concentración y es relajanteFortalece los huesos, mejora la respiración y la circulaciónEstimula el sistema inmuneAyuda a balancear las emociones
El yoga es una de las pocas actividades que se puede comenzar a cualquier edad, los ejercicios de yoga se adaptan a las capacidades y a las necesidades de la persona y sus beneficios para la salud lo hacen una herramienta muy valiosa para pasar por esta etapa de la vida.